No discriminar ningún municipio
Del mismo modo que AVA-ASAJA reclama que ningún productor damnificado por la DANA quede fuera de las ayudas, también solicita ampliar el listado de municipios beneficiarios para que ninguna localidad afectada sea excluida de las medidas de apoyo aprobadas. La organización agraria exige al Gobierno y a la Generalitat que incluyan los términos de Túejar, Chelva, Ademuz, Terrateig, Venta del Moro, Llanera de Ranes, Villargordo del Cabriel, Gavarda, Massalavés, Senyera, Benagéber, Titaguas (en la provincia de Valencia) y Alcalà de Xivert-Alcossebre, Adzeneta del Maestrat, Benassal, Benicarló, Benlloch, Cabanes, Càlig, Canet Lo Roig, Catí, La Pobla de Tornesa, La Salzadella, La Serratella, La Serra d’En Galceran, La Torre d’En Besora, Les Coves de Vinromà, Penyíscola, San Jorge, Sant Mateu, Santa Magdalena de Pulpis, Tírig, Traiguera, Torreblanca, Torre d’En Doménech, Vall d’Alba, Vilanova d’Alcolea, Vinaròs y Xert (en la provincia de Castellón).
Asimismo, AVA-ASAJA pide al Gobierno que incluya los municipios que la Generalitat Valenciana sí ha añadido en su primer decreto de ayudas por la DANA o en una reciente corrección: Alberic, Barxeta, Benaguasil, Benimodo, Carcaixent, Castelló de la Ribera, Castielfabid, Chulilla, L’Ènova, Manuel, Millares, La Pobla Llarga, Rafelguaraf y Tous.
El dirigente agrario denuncia que “el Ministerio de Agricultura sigue dando la espalda al campo devastado por la DANA. De momento no ha llegado ni un euro a los bolsillos de los agricultores afectados. Muchos productores no van a cobrar ninguna ayuda porque no son autónomos o porque tienen daños importantes pero que no alcanzan el 40% de pérdidas según las peritaciones de Agroseguro. Muchos pueblos damnificados ni siquiera han sido incluidos en el listado de las ayudas. Estamos advirtiendo de que las medidas agrarias de apoyo son discriminatorias, insuficientes y tardías. Es lamentable que el ministro Planas no haya convocado aún la mesa técnica que había prometido para atender nuestras necesidades reales”.
Concluye Aguado que “hace falta dirección, coordinación entre las distintas administraciones y más medios para acelerar la reparación de las infraestructuras agrarias. Parece que el Gobierno lidera una reconstrucción sin pies ni cabeza. Y no podemos continuar esperando semanas y meses a que asuma su responsabilidad en una situación tan extraordinaria”.